Por: Norma Esquivel

Tanto la homosexualidad masculina como la femenina tienen varias causas. Elizabeth R. Moberly escribió su libro acerca de la identidad de género masculino. En este libro, “Homosexualidad, una nueva ética cristiana”(1983), menciona que las necesidades no suplidas de amor, dependencia e identificación con el padre del mismo sexo pueden producir incertidumbre e inseguridad, y que la persona al ser adulta tiende a llenar ese vacío a nivel inconsciente con otro hombre que le dé su apoyo y su amor.

Por otro lado, la relación del varón con su madre es su modelo para relacionarse con las demás mujeres. Si esto no se da así, porque de niño se identifica con ella en lugar de hacerlo con su padre, se va construyendo un modelaje más fuerte de identidad femenina. Cuando el padre no suple sus necesidades emocionales el niño se identifica más con su madre “copiando” más el modelo femenino que el masculino. Aquí se da una actitud defensiva, un distanciamiento de su padre, aceptando más el modelo femenino.

Por Michael Newman

Durante más de treinta años he ministrado a personas con quebrantamiento sexual, y también a sus familiares. A menudo he planteado la importancia de la enseñanza del diseño perfecto e ideal de Dios para la sexualidad. 

Por Denise Shick

Actualmente la cultura está sumergida en la confusión de género. En Estados Unidos, el famoso Bruce Jenner permitió que su transición a mujer fuera transmitida por televisión; la periodista Bárbara Walters ha aparecido como defensora de los niños en transición, al igual que otros como Oprah. Recientemente Jazz, un transexual adolescente, se convirtió en parte de una campaña de publicidad de productos cosméticos para adolescentes, que promoverá esta confusión entre ellos.