Por Tim Broach

Cómo ya hemos dicho, hay una conexión entre liderazgo espiritual e intimidad con Dios. Frecuentemente como líderes nos sentimos muy cargados y cansados. Les invito a captar la invitación que Cristo nos hace en el siguiente pasaje.

“Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso. Carguen con mi yugo y aprendan de Mí, pues yo soy apacible y humilde de corazón, y encontrarán descanso para su alma. Porque mi yugo es suave y mi carga es liviana.” Mateo 11: 28-30 NVI

Por Frank Worthen

“Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día. Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; se volvió mi verdor en sequedades de verano” Salmo 32:3, 4

En algún momento Martín parecía tenerlo todo. Pero esa fase de su vida se había esfumado. Ahora se encontraba en medio de una severa depresión.

“No sé qué es lo que pasa conmigo”, me dijo en una sesión de consejería. “¡Parece como si me fuera a romper en pedazos!” Aunque no había practicado la homosexualidad, Martín tenía un gran interés en el estilo de vida homosexual. Se encontraba a una corta distancia de sus límites, como una mariposa revoloteando alrededor de la flama.