Una relación de rendición de cuentas es una herramienta que abre una ventana hacia nuestra vida…
Constantemente vemos cristianos que fracasan moral, espiritual, relacional y financieramente, no porque no quieran tener éxito, sino debido a puntos ciegos (comportamientos que son incapaces de ver) y puntos flojos (áreas que necesitan reforzar) que piensan que pueden manejar por su cuenta. Y no lo pueden hacer. Los cristianos caen porque no tienen que rendir cuentas ante nadie por su comportamiento y sus creencias.